En español de España: "No por mucho madrugar, amanece más temprano", o mejor... "Sin tele y sin cerveza, Homer pierde la chaveta".
Bromas aparte, nos encontramos ante la adaptación de la novela homónima de Stephen King, que conocí en su momento, allá por 2014 y, cuando vi que existía un proyecto cinematográfico me encantó la idea y quería ver cómo se tomaba el testigo de la gran película de Kubrick, se hacía algo nuevo y, sobre todo, era capaz de mantener la altura y el nivel de una obra maestra en una secuela tecnológicamente más avanzada.