Scarecrow. La Maldición del Espantapájaros

Nada, que no escarmiento. Sabiendo como sé que desde el momento de darle al play paso a modo arrepentimiento, le doy, y como penitente en semana santa, me flagelo el cerebro un rato. Hasta el cartel es un engaño. No hay ni pechuga ni muslo ni contramuslo. Ni eso, ni casi de nada.

Los señores de SyFy han cogido algunas caras conocidas de Defiance y Los 100, series de la casa, por cierto Richard Harmon, como hagas otro papel de impresentable gilipollas al que quieres matar en el segundo uno de verte la cara, te van a encasillar, y a la encantadora niñita de Perdidos en el Espacio, que ya es toda una mujer, Lacey Chabert, para llevar este bodrio adelante, entre otros.

La peli va de una leyenda de pueblo en la que un espantapájaros está enterrado y, si sale de su encierro, se come a to'quisqui. Son esas cosas entrañables de los pueblos del maizal. Un par de tortolitos se meten a retozar en el granero equivocado y sueltan, claro está, a la bestia. Mientras, en el pueblo, se fleta un bus escolar con los 6 Bart Simpson castigados del colegio que, como pena, tienen que retirar el espantapájaros de la finca antes de de que sea vendida y colocarlo en la plaza del pueblo para júbilo de grandes y chicos. Al llegar les espera la maciza dueña de la finca, exnovia del profe guay que lleva a los castigados a trabajos forzados, y al ratito aparece el exnovio de la exnovia, examigo y ahora enemigo mortal del profe guay por haberle robado la novia.

Ya están todos los que son y empiezan las tiranteces con el espantapájaros que ya anda de correrías por el maizal.

Los integrantes de la panda van desapareciendo (a unos los ves morir y a otros los oyes a lo lejos) hasta que solo quedan tres. Al bicho lo matan una y otra vez, con resultados muy infructuosos. No se le puede matar. Lo dice la canción.

Al final agradeces que no llegue a noventa minutos y termine como esperabas que hiciera. Sin sorpresas y sin haberte entretenido, que es lo peor que se le puede decir a una peli. No voy a prometer que no lo volveré a hacer porque estaría mintiendo. Seguiré tragándome estas cosas y otras peores porque me encanta el cine y, de las malas, también se aprende.

Valoración #JaviFlim: 2,0

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